Banco Popular: Ana Botín declarará como testigo en el caso que mantiene atento a Luksic

El titular del juzgado central emplaza además al que fuera presidente de Santander España cuando la entidad se hizo con B. Popular, Rodrigo Echenique, para el próximo 4 de junio, igualmente como testigo.

Ambas comparecencias, explica el juez, han sido solicitadas por una de las acusaciones particulares.

De Guindos

Por otra parte, el vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, también declarará como testigo por videoconferencia el próximo 2 de abril. El juez Calama rechazó su pretensión de hacerlo por escrito. La videoconferencia se celebrará posiblemente desde la sede del BCE.

A finales de enero, De Guindos, que ya testificó por videoconferencia en el juicio por la salida a Bolsa de Bankia, pidió poder testificar por escrito en la causa que investiga a los dos últimos equipos gestores de Popular.

Luksic en medio  

El pasado 20 de febrero, el empresario y uno de los máximos accionistas del holding Quiñenco, Andrónico Luksic, estaba decidido a seguir dando la batalla legal para recuperar la inversión que hizo en el desaparecido Banco Popular de España, hoy en manos de Santander.

El conflicto se produce por una diferencia de interpretación en la norma, según confirman fuentes jurídicas.

En la ley que regula el Impuesto de Sociedades, se establece que este perfil de grandes inversores, principalmente fondos y sociedades patrimoniales, pueden deducirse las pérdidas producidas por la "extinción de la entidad participada". Es decir, sólo si la empresa desaparece, pero no si es fruto de una reestructuración.

Y, atendiendo a la normativa europea, Hacienda considera que la resolución de Popular fue un tipo de reestructuración y no una extinción. Tras ser declarado inviable por el BCE la madrugada del 6 al 7 de junio de 2017, la Junta Única de Resolución, con sede en Bruselas, ordenó la amortización de todas las acciones de Popular y de sus dos emisiones de CoCos, así como la conversión en acciones de nueva emisión de toda la deuda subordinada. Estos títulos se vendieron a Santander en el marco de una subasta competitiva exprés por el precio simbólico de un euro.

Popular pasó a ser filial al 100% de Santander que, para restablecer la situación patrimonial realizó una ampliación de capital de 7.000 millones de euros. Popular mantuvo su personalidad jurídica hasta septiembre de 2018, cuando Santander absorbió esta filial.